UNA PELÍCULA
La tengo complicada. Me toca escribir el mismo día en que escribe el Gato. Encima mientras escribo esto, el simpático de Laciar sube el escrito del Perro y de Ciarlo. Por suerte (no sé si buena o mala) tengo la película, así que haré un breve resumen de una breve idea.
Cuando Jack me pidió que dijera dos palabras al terminar el partido, yo dije: se logró. Por cuestiones de idioma el griego no entendió que esas son dos palabras. Las elegí porque creo que es lo que mejor representa el significado del campeonato (aunque con el ascenso solo era lo mismo) para los más antiguos. Esa mezcla de sorpresa, objetivo cumplido y la gran duda de decirse ¿Y ahora?. Por eso la película trata de ser una mezcla de la historia y el campeonato, porque en parte el campeonato se dio por la historia, al mismo tiempo que los más viejos nos miramos y nos guiñamos un ojo porque sabemos que sin los “nuevos” no se hubiese podido lograr.
Muchos hablan del grupo y la unión. Como dije post partido, creo que el mayor motivo es que esta vez no hubo estrellas. No solo por el que se cree estrella, sino porque el equipo no miró estrellas. Por primera vez éramos todos iguales. Sabemos bien que gran parte del campeonato fue por los goles del Perro, pero el Perro es una estrella en silencio, que no presume ni busca diferenciarse. A partir de ahí se armó un equipo. También dije que al ver fotos viejas descubrí que ya habíamos tenidos buenos planteles, pero nunca tan buen equipo. Un equipo sólido, dónde cada uno terminó aceptando su rol en el grupo. Y eso también traté de que se vea en la película.
En los inicios, mi hermano me despertaba un domingo a la mañana (muy mañana) para que vaya a jugar porque les faltaba uno. Lográbamos hazañas, como ganar uno a cero en cancha 6 con gol de Nacho de cabeza, previo centro de Fede, siendo 10 jugadores todo el partido. También viví la etapa en que iba a ver los partidos (no jugaba porque el arquero – Leo Sarubio, o como se llame– usaba mi carnet) y al terminar el primer tiempo mi hermano se acercaba y me preguntaba cómo había visto al equipo; mi respuesta siempre era la misma: son muy defensivos, el zurdo ese juega bien, tiene que jugar de enganche, más adelante (si, hablo de Fede. Posta, era bueno). Hubo momentos en que me tocaba entrar al final del partido, agarrar un rechazo “a cualquier parte” de la defensa, llevarla al córner contrario para aguantarla, hacer tiempo, y al lograr ganar un lateral, sentir una ovación mezclada con grito de guerra de los rejunteros que todavía no habían salido de nuestra área. Eso era Rejunte, pero también es otra cosa…
Rejunte es una historia para cada uno, con su mirada, su experiencia. Por eso la película no se cierra. Muchas cosas quedaron afuera, muchísimas si tenemos en cuenta la historia que se podría agregar. Muchas del festejo y casi todas del torneo. La paradoja quiso que hace tiempo ya no saque fotos como antes. Como le dije a Cesar: este año no saqué mucho porque me había cansado de sacar al pedo. Porque esta película la planifiqué hace años…sépanlo. Ahora se concretó, pero tantos años no entran en una pequeña producción. Podía seguir agregando y no terminar nunca. Incluso dudé en poner al final el emotivo impreso de “continuará… “. Pero preferí que la película se cierre en cada rejuntero, que cada uno de ellos sea el que decida si continúa o no, y cómo continúa. Porque en serio creo que “Veteranos B” nos espera algún día (después de un año en la B claro está), pero también creo que los pendejos deberían seguir con Rejunte Jr.
Como siempre, dependerá de nosotros. O cómo dijo el sabio poeta: este asunto está ahora y para siempre en tus manos.
Ahí tenés la película rejuntero, fijate lo que hacés…
PD: espero no tener que dejar de preguntar ¿Vos querés salir campeón?... Para tener que preguntar ¿Para qué mierda salimos campeones?
PABLO
LA PELICULA DEL CAMPEON
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