Estuve tentado de hacer la
crónica en caliente ayer como pidió un rejuntero, y hasta le pedí urgente los
puntajes a Elio pero me sacó cagando porque estaba negociando por privado ser
benevolente con un par de jugadores a cambio de aceite de oliva pero no voy a
mandar al frente a nadie. Entonces, por esas cosas del destino dejé pasar las horas
para enfriarme y que bajara la espuma como Néstor lo bajó al delantero y cobraron
offside, por lo que ahora puedo escribir más objetivamente y ver las cosas de
otra manera.
Por eso puedo decir, pero con
tranquilidad: la reconcha de su madre y la reputísima madre que lo remil
parió!!! Al árbitro, a Enrique, a la pelota que no dobla, al 9 que entró a
jugar como si fuera el última partido de su vida y meter codazos hasta cansarse,
al 8 que hizo un surco de tantos desbordes, al 2 que era horrible y llego 100 veces
despatarrado y principalmente a todos nosotros, los ex punteros, porque desde
el primero en salir hasta el último en entrar, pasando por los 8 que jugaron
los 80 minutos, somos responsables de haber dejado dos puntos que estaban en el
bolsillo y que nos punguearon como en el tren de las 7:30 a Once.
Cuesta mucho encontrar las
palabras para describir lo que fue el mediodía de sábado en cancha uno, cancha
de mierda que nos tiene embrujados y hace rato no ganamos ahí. Creo que la
mejor palabra es desazón, porque es lo que se vivió en el banco apenas terminado
el encuentro. Más allá de algunas reacciones de calentura, el común denominador
fue el silencio sepulcral y la falta de ánimo como para quedarse a tomar algo y
charlar, porque no había nada que charlar. La bronca fue mayor que cuando se
pierde, porque generalmente perder está dentro de las posibilidades, pero
cuando te ilusionás con seguir puntero pese a jugar un partido regular estás
pensando que así también ganan los campeones, y cuando te empatan de esta
manera te preguntás como mierda remonto este fin de semana y te querés cortar
la chota en 10 pedazos de 2,5 cm (hablo por mi, no se uds)
En fin, más recuerdo más caliente
me pongo así que lo mejor va a ser recordar, con menos ganas que las que tengo de
laburar en la semana, pero haremos lo posible por ser lo más justo que me salga
para este olvidable (o inolvidable) Rejunte 2 (Gato x 2) – Enrique 2.
Con un equipo diezmado por
lesiones (Mauro, Pela), ausencias importantes (Tano y Juan) y por otra parte
sin Jack, Rejunte esperaba al colista Enrique buscando revancha del año
anterior con las ganas acumuladas luego de 21 días sin fútbol.
En la previa, en chiste se había
tirado la posibilidad de firmar el empate ya que estábamos cortos de plantel,
sin recambio natural para la defensa y cualquiera fuera el equipo inicial,
tendríamos un banco proclive al ataque y no a la marca.
Sin embargo Rejunte siempre
quiere ganar, hasta las discusiones por Whatsapp, así que salió decidido a
llevarse los tres puntos, pero lejos estuvo de plasmarlo en la cancha en los
primeros 40 minutos, para los que Beto decidió que formara así:
Mariano
Colo Herno Néstor Manu
Feli Planta Negro Fede
Gato Perro
Luego de cinco minutos de prolijidad,
pases cortos certeros y buen despliegue de Rejunte, el equipo entró en una
nebulosa inexplicable y dejó de tener la pelota casi por completo, sin poder
descifrar el esquema de juego del rival, que raramente no utilizaba a su
mediocampo para atacar, sino que salían casi siempre largo desde el 4 y el 3 de
manera directa a los dos punteros que quedaban mano a mano con Colo y Manu,
quienes sufrieron demasiado desde los 5 a los 30 de la etapa.
La pelota pasaba por arriba al
medio rejuntero y caía en la lucha de los defensores que una y otra vez la
rechazaban, pero no podía ser dominada por la kermés y por lo tanto las jugadas
de peligro eran aisladas y no eran fruto del juego colectivo, precisamente.
De todos modos, Enrique no
generaba mayor peligro que con centros bien cortados por Mariano y algunos
otros rechazados por los centrales, pero el partido tenía una chatura
exasperante.
Sólo recuerdo tres jugadas de
peligro a favor del verde, que fueron una encarada por izquierda del Perro que
entrando al área remata bien cruzado y la pelota es desviada al córner por el arquero,
otra de Néstor que capturó un rebote después de un tiro de esquina y la mandó
al Pabellón 3, y la última de la etapa un recupero del Negro (que había
cambiado posición con Feli( también tras un córner, toque a Planta para que hombre
de Cañuelas rompiera líneas con pelota dominada y disparara desde lejos por
arriba del larguero.
Pareció que esa última jugada
despertó al equipo, porque para el segundo tiempo la actitud de los primero
diez minutos fue la de un equipo campeón. Aún sin lograr mucho juego colectivo,
los rebotes siempre fueron ganados por uno de verde y los rivales pedían por
favor a sus compañeros jugar un poco en campo contrario (literal, lo pude
escuchar de un delantero).
Así no fue raro que se abriera el
marcador a los 5 minutos en favor de Rejunte. Lo que si fue raro es la manera
en que se dio y desde esta redacción decidimos -sin saber el informe final del
árbitro- otorgar el tanto al Gato, ya que hubiera sido sin dudas el gol más
horrible de la carrera del Negro.
La cosa fue así: despeje alto y
malo de la defensa de Enrique que va a caer a la posición del muchachito de
Merlo, parado en posición de ocho cerrado hacia el medio, pero a 35 metros del
arco. Con la pelota en el aire, el Negro ve que Fede había quedado de puntero
izquierdo con todas las de ganar la espalda del último defensor, por lo que un
buen pase lo dejaba mano a mano. Hacia allí quiso dirigir la pelota el moreno
número 10, bien cruzado, pero le pegó tan mal al balón que de aire le dio de
zurda y el balón salió directo al centro del arco, apenas bombeado para que
picara tres metros antes del arquero que se puso nervioso, se metió dentro del
arco y se vio la red moverse.
El grito de gol fue inmediato y
el árbitro estaba marcando el centro de la cancha, pero al ver que el despeje
del golero le quedaba al Gato, dejó seguir un poquito más y cuando el eterno
delantero la mandó a la red decidió correr hacia la mitad y marcar
definitivamente el gol.
Justo gol para Rejunte que a base
de actitud había borrado al rival y siguió con la misma intensidad para que
tras un muy buen desborde del Perro, la bola le quedara nuevamente a Lion O en
el área chica y definiera como sabe para poner el 2-0 a los 15 minutos.
Inmediatamente el equipo tuvo dos
más en la misma jugada, porque otra vez el Gato quedó mano a mano pero fue
atorado por el arquero y el rebote quedó picando en la puerta del área ideal
para la emboquillada, pero tanto el
Negro como Fede estaban con pierna cambiada y al final ninguno le dio al arco,
el Negro por errar el golpe de zurda pensando
que le daría Fede y éste por pensar que le daría su compañero y porque le quedó
para la derecha.
Santi tuvo una más ingresando por
derecha pero no le dio el ángulo para el remate y eligió enganchar para adentro
y darle de zurda pero el balón se fue por arriba.
El partido estaba más para el
cuarto que para el tercero pues Enrique había bajado los brazos, pero Rejunte
no lo liquidaba. Entró Axel por Cesar a los 15 y todo siguió igual, con Mariano
como espectador de lujo ya que ni un saque de arco tenía que hacer.
A los 20 se fue ovacionado el Gato
para el ingreso de Chancla, Fede tuvo una más entrando por izquierda pero no le
dio bien y también se fue desviado su remate en lo que fue su última
intervención a los 25 para ser reemplazado por Pablo.
Como opinaré más adelante, estoy
convencido que no fue por los cambios exclusivamente, pero a los 30 el equipo
entró en una desesperación inédita para un plantel con tantos partidos sobre el
lomo y principalmente para un equipo que viene de ser campeón.
Rejunte literalmente se volvió
loco y todo lo bueno que se había hecho en esos 30 minutos -insisto, sin jugar
lindo pero siendo efectivos e intensos pero con inteligencia-, se echó por la
borda con decisiones y actitudes inentendibles.
La primera señal de alarma llegó
con el primer foul del equipo en la etapa, cuando Axel se lleva puesto de atrás
a un delantero que ya tenía la pelota casi perdida. No le vamos a caer por eso
al chico del clima, pero es un detalle que debe revisar para sumar viveza a su
despliegue incansable, cuando entra desde el banco lo hace con las revoluciones
a mil y eso le juega en contra, ya lo expulsaron injustamente dos veces y estas
faltas son consecuencia de eso. De ese tiro libre llegó un cabezazo en el
travesaño y luego de eso Enrique se agrandó.
Faltaban diez minutos y Mariano
se estaba convirtiendo en figura a base de rechazar centros peligrosos, pero
tras una serie de rebotes vino el descuento a quemarropa de Enrique y la
catástrofe se veía venir. Como muestra, luego del gol Manu seguía gastando a un
rival y el tipo le dice: no te das cuenta que te acabo de descontar? Si el
resultado hubiera terminado con triunfo verde, sería una anécdota graciosa,
pero como terminó feo para nosotros, es un detalle de que el equipo se estaba
desconcentrando demasiado y se había olvidado por completo de como cerrar el
partido.
La pelota empezó a quemar en los
pies de cada rejuntero y el juego empezó a parecerse a un frontón: rechazo
defensivo verde, arriba no la podíamos aguantar y otra vez a nuestra última
línea. El medio cambió roles con Mariano y empezó a mirar como la pelota iba y
venía sin poder pararla y en las pocas que se la paraba las decisiones no fueron
las mejores. Así y todo, Enrique no llegaba con claridad y Rejunte esperaba el
error rival para quedar mano a mano.
En tiempo cumplido la profecía
autocumplida tuvo lugar: vigésimo desborde del 8 rival por derecha, centro,
rechazo de Mariano, rebote, nuevo rechazo rejuntero, algo reclamaron los verdes
pero la pelota se fue hacia la derecha y más allá de que era posición del Colo,
ningún rejuntero atinó a correr el balón y prefieron el grito desaforado. No se
que pasó realmente, no quise hablar con nadie al respecto pero lo cierto es que
fue una desconcentración increíble porque eso le dio tiempo al delantero a
tomar la pelota tranquilo y encarar, meter nuevo centro buscapié, que la pelota
rebote nuvamente para al fin quedarle a un tipo completamente solo en área para
mandarla adentro ante un Mariano que nada podía hacer.
Demasiado premio para Enrique y
demasiado castigo para Rejunte, ya que si bien se vino abajo no merecía que se
lo empaten de este modo, y por eso es entendible la calentura de cada rejuntero
al finalizar el encuentro y que seguramente dura hasta ahora.
Hasta acá lo que fue el
encuentro, y voy a tratar de dar mi opinión sin caer en lugares comunes. La
visión facilista de las cosas sería que se hicieron tres cambios y nos
empataron. No coincido con eso, al menos no totalmente.
Es cierto que hasta el último cambio
el partido estaba 2-0. También es cierto que los cambios no tuvieron su mejor
tarde. Pero tampoco César fue Rojitas ni Fede fue Zanabria. Es más, el único
destacado a mi entender fue Gato que con 40 y pico de pirulos sigue metiendo
goles.
Cuando salió el Negro con el
partido 2-0, Rejunte ya había tenido dos chances claras de aumentar, luego tuvo
una más ya con Chancla en cancha y otra ya con Pablo e incluso el árbitro no
cobró un penal clarísimo sobre el Perro, por lo que no lo supimos definir más
allá de los nombres propios.
Por otro lado, en el partido más
imporante de la historia rejuntera Beto mandó a la cancha a Néstor, Pablo y
César con el partido 1-0 y se terminó ganando por uno más, por lo que claramente
la cuestión no pasa por hacer o no todos los cambios, máxime cuando el partido
se nota dormido y dominado. Además, en los 20 partidos de año el equipo jamás
se descompensó por los cambios, incluso al hacer 4 o 5 durante el juego, por lo
que entiendo a este partido como algo aislado que tiene múltiples factores: 1)
la imposibilidad de liquidar al rival cuando está tirado en el piso. 2) la
merma en la actitud. 3) la falta de claridad para hacer tiempo con la pelota en
los pies. 3) las desconcentraciones reiteradas. 4) Que todo eso pase en 15
minutos.
Sin embargo y espero que
compartan, hay que darle la derecha y la libertad a Beto para que haga lo que
considere en cada partido. Cuando crea que está para que juguemos todos así
será, cuando vea que no se puede no se podrá y cuando decida arriesgar lo
tenemos que bancar. Obviamente todos queremos jugar y en lo personal saben
todos que planteé mi molestia la última vez que quedé sin entrar pero fue en
otro contexto. Ahora tenemos que tirar todos para adelante, jugar concentrados
todo el partido y olvidarnos por completo de discutir con el rival, de entrar
en el juego de ellos y de gastar a nadie. Somos un equipo con mayoría de tipos
grandes y con experiencia, no nos podemos sacar más y jugar con la boca más que
con los pies. Busquemos el equilibrio y concentrémonos los 80 minutos. Sé que a
veces las revoluciones juegan en contra pero tenemos que ser fríos. El año
pasado lo mejor que tuvimos fue la cabeza y la templanza, saquémosla del baúl
de los recuerdos y pongamos de nuevo en práctica la receta que nos llevó a
donde estamos. Sigue dependiendo de nosotros y haber perdido la punta tiene que
ser el aliciente para recuperarla. Seguimos invictos, seguimos unidos, seguimos
siendo Rejunte carajo.
Buena semana, pensemos ya con sed
de venganza contra Reseristas, nos esperan el próximo sábado.
Puntajes de Elio:
Mariano: 6,50. Buen partido. Sacó
bien de abajo y de arriba y salió muy bien con los puños. Nada que hacer en los
goles contrarios.
Colo: 4,50. Sufrió mucho en el PT
con el puntero izquerdo y erró varios despejes. En el ST mejoró pero se
desoncentró discutiendo con un rival. Se comió un patadón y un codazo y se lo
notó caliente. Dale Colo la próxima la rompés.
Hernan: 6. Firme para rechazar, muy
bien de arriba especialmente. No tuvo complicaciones contra un equipo que atacó
por afuera.
Néstor: igual que Hernán, metió y
salió jugando. Perdió algunas pero compensó con buenos quites.
Manu: 4. Con la pelota en los
pies, fue su mejor partido, salida clara siempre. Regular con la marca (muchos
desbordes contrarios) y muy flojo con la concentración. Se le sale la cadena y
habla demasiado, eso le baja puntos.
Feli: 6,5. Padeció cuando estuvo
de ocho porque no estaba en sintonía con Colo (se dieron malos pases recíprocos
varias veces). Mejoró de doble cinco y fue fundamental en ahogar al rival al
inicio del ST. Se cayó como todo el equipo.
Planta: 5,5. Impreciso en uno de
sus fuertes que es el pase largo. Perdió algunas pelotas importantes. Buen
inicio de ST, buscó siempre para adelante. No pudo tener la pelota sobre el
final.
Cesar: 5,5, De menor a mayor.
Buen inicio pero se cayó en el PT, entró poco en juego en la etapa. Mejoró en
el ST y fue importante para presionar arriba. Su casi gol abrió el partido,
mejoró en lo físico y debe jugar más con la pelota.
Fede: 5,5. Poca participación,
buenos pases por momentos. Buscó siempre a los delanteros con suerte dispar.
Faltó marca sobre el 8.
Perro: 6. Incansable para buscar
y generarse solo las jugadas de peligro. Tuvo una clara que sacó el arquero y
otra que no le cobraron un penal.
Gato: 7. Vigente y eterno. Gran
viveza para buscar el rebote en el primer gol y mente fría para definir en el
segundo. La figura de la cancha.
Axel: 5. Entró bien y se
desdibujó con el correr de los minutos. Dos faltas de inexperiencia le bajan un
punto.
Chancla: 4,5. Mucha voluntad pero
no pudo aguantar ninguna. Solo un buen desmarque que generó peligro. Debe ir
más firme al choque.
Pablo: 4,5: No pudo generar juego
por izquierda y perdió la marca del 8 varias veces. Le baja medio punto la
amarilla por protestar.